Si renuncias a tu sueño, estás muerto.

flashdance-the-musicalEsta es la frase que me impactó más hace unos días cuando volví a ver, tras muchos años, la película flashdance. No recordaba el argumento, tan solo que bailaban, y realmente… como bailan!!! Y que banda sonora!!!

Con esta banda sonora me sentí transportado emocionalmente, a sensaciones de hace muchos años, la verdad que no recuerdo ni dónde ni cuando, simplemente me permití conectar con las emociones que surgían. Es un claro ejemplo de lo que en PNL se denominan «anclas», cuando un estimulo desemboca en una respuesta completa. Lo que si me vino a la mente racional es el recuerdo de que tuve el «cassete» de la banda sonora de flashdance, y he visto que es de cuando tenía unos 10 años. Es impresionante como la mente subconsciente, en continuo contacto con el cuerpo, almacena toda la información, y como de repente, cuando aparece un estímulo, se desemboca el flujo de esa información a nivel físico y emocional. Me sabía las canciones!!! Las podía cantar casi enteritas!!! y sentir sensaciones y emociones fantásticas!!!!

Para el que no conozca la PNL, tan solo puntualizar que eso, que se generó de manera automática y natural en mi por lo que viví en esa época escuchando esas canciones, también se puede realizar de manera voluntaria con ejercicios de PNL, favoreciendo estados de ánimo y re-activando recursos para ser nuestra mejor versión (es una de las cosas que hacemos en los talleres como el de este link)

Y ahora vuelvo al título del post. Corresponde a una frase que le dice el «chico» a la «chica» cuando ella decide que no se presentará a la audición para ser aceptada en la escuela de baile. Ella se dedica a trabajar como soldadora en una empresa propiedad del que luego es su novio, y también baila en un bar-espectáculo, donde el chico la ve una noche y se enamora tras ver lo que ella transmite cuando baila. Nunca ha estudiado danza, ni ballet, ni similar, ha sido autodidacta y cuando sale al escenario, suena la música y se pone en movimiento, simplemente ES ELLA. Se la ve y se la siente fluir completamente, conectada con quien realmente es, con lo que la hace disfrutar y, a la vez, lo que hace mejor. Y su sueño es poder estudiar en la mejor escuela de baile de la ciudad, a la que las personas que acceden ya han estudiado en varios centros de danza clásica o contemporánea. Y ella, CREE que no podrá acceder a esos estudios.

Si, ella tiene creencias que la limitan mucho en ese aspecto, y que la relegan a solo poder fluir actuando en un bar «cutre» donde las luces le impiden ver que hay personas observándola y, por tanto, ella baila simplemente para ella. Cree que no sirve para más y que su vida ya es como puede ser. Por suerte, es amiga de una anciana que en su juventud fue bailarina, a la que ella admira, y que SI CREE EN ELLA, y la incita a inscribirse para realizar una prueba. Y, curiosamente, ELLA SI CREE en las capacidades de su gran amiga, que, a parte de ser camarera en el mismo bar donde ella baila, se prepara para una prueba de patinaje artístico. Parece mentira (y triste) que la sociedad nos haya «condicionado» a creer más en los demás que en nosotros mismos (no vaya a ser que seamos nuestra mejor versión y desmontemos la estructura que beneficia a unos poquitos).

Finalmente, cuando consigue animarse para solicitar poder hacer la prueba, el chico llama a un amigo suyo que tiene algo que ver con el comité artístico de la ciudad, tan solo para que acepten hacerle la audición (su valía como bailarina la deberá demostrar en la prueba, simplemente la burocracia no frenará esa oportunidad). Ella se entera de esa llamada y decide no ir a la prueba, ya que quiere «hacerlo sola». Pasar del no creer en uno mismo, a no querer ningún tipo de ayuda también es algo habitual. De repente se bloquea, y o bien por orgullo, o bien por miedo y siendo una perfecta excusa para evitar la opción de fracaso (o de éxito), decide no presentarse.

Aprovecho para recordar las palabras que utilizó Mandela:

«Nuestro mayor temor no consiste en no ser adecuados.

Nuestro temor consiste en que somos poderosos más allá de toda medida. 

Es nuestra luz y no nuestra oscuridad lo que nos atemoriza.

Nos preguntamos: “¿Quién soy yo para ser brillante, espléndido, talentoso, fabuloso?” 

Pero,  en realidad, ¿quién eres tú para no serlo? Eres hijo de Dios.

Tus pequeños juegos no sirven al mundo.Disminuirte a ti mismo para que los demás no se sientan inseguros a tu lado no tiene nada que ver con la iluminación. 

Todos estamos hechos para brillar, como brillan los niños.

Nacemos para manifestar esta gloria que está dentro de nosotros. 

Y no es que esté solo en algunos, está en todos nosotros.

En la medida en que dejamos que brille nuestra propia luz,

damos a otros permiso para hacer lo mismo.

En la medida en que nos liberamos de nuestro miedo,

nuestra presencia libera automáticamente a otros»

Y en ese momento en que ella renuncia, es cuando, tras una discusión, él le suelta esta, bajo mi modo de entenderlo, enorme frase:

SI RENUNCIAS A TU SUEÑO, ESTÁS MUERTO.

No se trata de que debamos vivir en un mundo imaginario en el que nos alejemos de la realidad. Se trata de que todos tenemos sueños, tenemos talentos, tenemos capacidades para desarrollar y podemos ofrecernos a nosotros mismos y ofrecer a la humanidad, nuestra mejor versión. Y nuestra mejor versión tan solo se puede dar cuando lo que hacemos está en resonancia con quien somos. Cuando lo que hacemos es congruente con lo que nos hace felices. Cuando lo que hacemos está en armonía con lo que nos llena y nos potencia. Se trata de conectar con nuestra misión de vida.

Y aunque la sociedad nos haya impulsado a todos a desarrollar las mismas capacidades , y durante unos siglos haya sido positivo para el desarrollo humano un tipo de educación (prefiero entender que ha sido así), ya es momento de que cada cual pueda desarrollar sus potencialidades, encuentre su(s) talento(s) y se lo(s) regale al mundo.

Así que permitamos que los niños crezcan conociéndose y desarrollándose por quienes son. Que el que pueda ser mejor que Picasso o Matisse, no desperdicie su infancia y adolescencia sacrificándose para poder ser bueno con las matemáticas y las ciencias. Que el que pueda ser mejor que Einstein o Arquímedes, no quede bloqueado por que le cuestan los idiomas. Que el que pueda ser mejor que Platón o Borges, quede anulado por que le cuestan las artes plásticas. Permitamos y potenciemos que cada uno sea quien es. Así, todos sentiremos la vida fluyendo por nuestras venas, nuestros nervios, meridianos y nadis.

Como dijo Einstein: «Todos somos genios. Pero si juzgas a un pez por su habilidad para subir a un árbol, vivirá toda su vida creyendo que es un estúpido» 

Y si ya eres adulto, permítete conectar con tu sueño. Estás a tiempo de vivirlo, de muchas maneras diferentes.

Permítete subir al escenario de tu vida y sentir que ERES TU FLUYENDO.

Y ahora te invito a ver dos vídeos, que seguro te contectan con tu(s) sueño(s).

Bailamos

El Manifiesto Holstee

Y si te atreves a cambiar y sientes que te puedo ser de utilidad, será un placer acompañarte en un trocito de tu camino. Aprovecha ahora –  CATALYZING® – Catalización del cambio

Quietecit@ vs adaptativ@

bambú

Hace ya un tiempo que ronda por mi mente escribir sobre este tema, y hoy por fin coge forma física para poderlo compartir.

El título del post hace referencia a dos opciones básicas que tenemos:

1) Mantenernos en nuestra zona de confort, no tocar nada, quedarse con aquello de «mejor malo conocido que bueno por conocer» (si, aunque duela verdad?), confiar en que todo va a seguir siempre igual, y, cuando algo cambia, quejarnos por que alguien (ya sea persona, fuerza de la naturaleza o quien decidamos culpar) nos ha cambiado las condiciones de aquello que era LA REALIDAD. Y si no nos gusta el cambio, quedarnos inmóviles esperando a que «Alguien» nos devuelva lo nuestro.

2) Movernos, avanzar, atrevernos a probar cosas nuevas, a tomar la vida y los cambios como desafíos, a dedicar energía a lograr aquello que quiero, bailando con la canción que suene en cada momento.

Está claro que hay muchos factores que afectan a cómo actuamos de manera habitual, y que la misma persona puede que en diferente época esté experimentando más una manera o la otra de actuar.

Considero que es mucha mejor opción la segunda, ya que queramos o no, la vida evoluciona, está en continuo movimiento, dicen que es como ir en bicicleta, que si te paras te caes, y, como decía Buda, «Lo único permanente es el cambio». Así que, viviendo con esa capacidad de adaptación (que también otorga resilencia para los momentos más difíciles) es más fácil sentirse/ser feliz.

Para poder vivir con esta capacidad de adaptación, de aceptar los cambios como retos y oportunidades, y sentirnos cómodos con ellos, tener una buena base, unas raíces sólidas, haber experimentado seguridad, amor y apego siendo bebés y niños, es fundamental, por lo que regalar eso a nuestr@s hij@s es de lo mejor que podemos hacer. (de ahí la foto del bambú, como símbolo de fuertes raíces y resistencia gracias a su flexibilidad)

Y si, por ahí vino la idea original, por Nahual (nuestro hijo de 2 años). A finales de 2014 nació su hermana, y en marzo (justo antes de que el cumpliese los dos años) nos mudamos, cambiando también de guardería. Para él los cambios fueron, entre otros:

– Dejó de recibir todas las atenciones (no digo que dejó de ser hijo único ya que no lo era por tener 3 herman@s no nacidos con vida – comento algo más sobre esto en otro punto)

– Cambió de vivienda

– Dejó de dormir en el dormitorio con nosotros para dormir en su propio dormitorio.

– Cambió de guardería, dejando compañeros y cuidadoras conocidos por nuevas personas con las que compartir varias horas al día.

– Cambió los lugares por los que pasea

Y antes de todo esto, algunas preguntas que nos rondaban eran si sería capaz de adaptarse, si no sería muy duro para él tanto cambio, si le afectaría a su desarrollo……

Y resultó que se adaptó a todo ello con gran facilidad, quizá el que mejor de la familia ;-). Eso no quita que haya tenido alguna reacción de celos normal con su hermana, o que nos reclame de vez en cuando alguna atención más de la que recibe, o que nos muestre su desacuerdo cuando lo dejamos en la guardería. Pero su capacidad para disfrutar de la vida es muy superior a todo eso, y los cambios para él han supuesto motivaciones. Así que eso me hace pensar que, realmente, tiene unas buenas raíces (me hace sentir bien, y orgulloso de Anna, mi mujer, y de mi mismo).

Y este fin de semana han sucedido varias cosas que me reafirman en que esta manera de vivir es más saludable:

1) El viernes por la tarde estuve con unas cuantas mujeres embarazadas en el centro Yoga Omnium, en Sant Andreu (Barcelona) a las que les presenté el acompañamiento durante el embarazo a través de HipnoParto. La aceptación fue muy buena, y todas ellas estuvieron de acuerdo en que se pueden cambiar muchas cosas para disfrutar más de esta experiencia, incluyendo el momento del parto. Eso si, saben que, aunque su lógica les permita pensar de modo positivo, los aprendizajes recibidos están muy adentro y salen de manera automática muchas veces. Y allí está el reto, en atreverse a cambiar realmente, desde dentro. Gracias a todas las asistentes (puedes ver más sobre HipnoParto aquí)

2) El sábado también estuve con un grupo de mujeres en el taller que ofrecí en Espai Daleth de Comunicación Asertiva, relaciones y PNL (si, solo vinieron mujeres a esta edición). Y me encantó escucharlas, verlas y sentirlas, saliendo de su zona de confort, decidiendo hacer cosas para cambiar y ser más felices, especialmente dependiendo de las experiencias por las que estaban pasando en estos momentos de sus vidas. El taller es retador, y ellas se atrevieron a bucear para realmente hacer algo diferente. Gracias a todas las participantes (para el que quiera más info, el 13 de junio ofrecemos nueva edición)

3) El domingo estuvimos comiendo con varios ex-compañeros de trabajo de hace ……. unos 15 años!!!! Si, cuando yo me dedicaba a las finanzas. Y estar con ellos, me reafirmó en que mi evolución y adaptación ha sido muy positiva para mi. Guardo de la época muy buen recuerdo, y son personas bellísimas con las que es un placer compartir, y eso es compatible con saber que si me hubiese quedado quieto, o dejándome llevar por la corriente, me sentiría triste y vacío.

4) Este fin de semana ha nacido en facebook el  «Grup de Dol gestacional i neonatal Catalunya» destinado a facilitar las sinergias entre personas que han experimentado la muerte de un bebé durante la gestación o al poco de nacer. Y eso si que son experiencias que le sacan a uno, si o si, de su zona de confort. Así que, muy orgulloso de que Anna, mi mujer, haya gestado y parido este grupo donde las personas que forman parte pueden, entre otras cosas,  compartir experiencias, encontrar recursos, contactar con personas geográficamente próximas para crear sinergias, dar visibilidad a este tema, y, de este modo, adaptarse mejor a la nueva situación, ser más resilentes, y poder, al ritmo de cada un@, llegar a vivir con amor libre de dolor.

Así que, lanzo desde aquí un soplo de ánimo para tod@s para que seáis flexibles, adaptativ@s, pro-activ@s, viv@s, ….. FELICES!!!! (o si quietecit@s estáis bien, disfrutarlo; eso si, si te quejas piensa si realmente estás bien)

Escuchemos a nuestro cuerpo

Ayer por la mañana leí esta cita de Hipócrates y comenté lo siguiente en una red social:

Como mínimo escuchemos al cuerpo. Él habla, habla, y nos cuenta y nos pide y nos sugiere, y nosotros no lo escuchamos hasta que grita, y grita, y nosotros reaccionamos con sorpresa, con tristeza y dolor. Escanea tu cuerpo escuchando a cada una de sus partes de vez en cuando, y haz caso a lo que te sugiera intuitivamente, dejando las «excusas» generadas por tu parte cognitiva de «ya me lo miraré otro día….; seguro que se pasa….; esto es normal y con esta pastilla ya se me pasa….». Solo tenemos un cuerpo, y ese cuerpo somos nosotros, sin él no somos nada (al menos en este plano de realidad).

Al cabo de un rato fui al baño, a realizar algunas de estas actividades que, más o menos todos, realizamos diariamente. Y en un momento de conexión con mi yo más esencial bajo las dulces y templadas caricias del agua en la ducha, comprendí por qué para mi desde siempre el baño ha sido un lugar tan íntimo y personal.

Durante gran parte de mi vida he estado activo a un ritmo bastante acelerado, desde el primer momento al despertarme, ya fuese para ir a la escuela, a la universidad, al trabajo, etc… hasta el momento de irme a dormir, en el que frecuentemente «tocaba» leer algo o tener una conversación, etc… y de repente…. el baño. Me vino a la mente un oasis en mitad del desierto de desconexión con mi cuerpo. El baño ha sido mi oportunidad de conectar conmigo físicamente, de escuchar a mi cuerpo, de mirarme al espejo, de sentir el cepillo de dientes en las encías, de notar mis nalgas apoyadas en la taza del inodoro, de ser consciente de que en mi interior hay un aparato digestivo y uno excretor, de sentir mi piel en contacto con el agua, ya sea caliente, fría, relajante o estimulante….. en definitiva, esa ha sido durante muchos años mi «sala de comunicación mente-emociones-cuerpo». Ahí es donde he realizado muchos de los escaneos diarios para saber realmente cómo me siento, qué siento, y dónde lo siento.

En la actualidad, después de ya varios años vinculado al mundo de la PNL, el coaching, realizando visualizaciones guiadas de manera frecuente, algunas meditaciones, etc… esta conexión con mi cuerpo es mucho más frecuente, aunque el baño continúa siendo un lugar fantástico para asegurarme mi tiempo y mi espacio para estar en el aquí y el ahora.

Y ayer por la tarde tuve la ocasión de asistir a la 4ª charla-coloquio de La Nave a La Consciencia en Torre Amat, en la que hablamos con  Jenny Moix de su último libro «felicidad flexible» y luego Andrés Martín Asuero nos facilitó una meditación Mindfulness. Con ambas actividades estuve reafirmando la importancia del cuerpo, de tener consciencia de quién soy, en todos los aspectos de mi persona, para poder actuar sobre los que desee mejorar, colaborando conmigo mismo a ser más feliz.

Es genial sentir las sincronías de la vida, saber que el fluir con lo que la vida nos facilita y estar atento por estar conectado y presente, hace que todo avance hacia un lugar en el que da, cada día más, la sensación que es el más adecuado, que es justo ese mi lugar en este momento y me permite continuar sintiendo el aquí y el ahora.

Para todo aquel que tenga interés en iniciar una mejora, una mayor conexión entre cuerpo, mente, emociones, etc…  una de las opciones es la PNL (Programación Neuro Linguística), que justamente nos facilita técnicas para mejorar los «programas» que mediante lo lingüístico (lo verbal y lo no verbal) hace que nuestra Neurología (todas las neuronas y resto de células de nuestro cuerpo) sientan de determinada manera. Os ofrecemos la oportunidad de iniciaros con Una Cata de Crecimiento, un taller de un día de duración y que tiene actualmente programadas dos fechas: 30 de Junio en Terrassa y 21 de Julio en Sabadell.

Puedes solicitar más información  o apuntarte por teléfono 633.706.249 o por mail info@oscarguirado.es, y enviar los datos del taller a todas las personas que consideres que les puede interesar.

Un gran abrazo (si, con consciencia plena del contacto)

Puedes descargar el pdf del taller para ver más información en el siguiente link:  Un Tast de Creixement